El Ford Fiesta pisa fuerte e incluso es “carne de cañón” para el SEMA, ese evento de lujuria y desenfreno visual sobre ruedas en el que normalmente adquieren protagonismo las preparaciones más originales y llamativas de SUVS, berlinas de cierto nivel y deportivos. Pero también hay hueco para un coche tan global como el Fiesta. Ocho versiones se verán en el SEMA cargaditas de colores y de más cosas.
Cada una de las variantes tiene algo de original e incluso de sorprendente. Por empezar por alguna el Fiesta azulón de Ford Racing es el que tiene más pinta de Fiesta WRC pero lo más importante es su futuro. Durante su presentación será pintado por un artista y posteriormente el coche será subastado para recaudar fondos a favor de una asociación que se dedica a financiar la investigación sobre la enfermedad de la diabetes.
El siguiente Fiesta sale de la división Ford Vehicle Personalization y se presenta en blanco con detalles plateados y verdes, muy ecológico a la vista. Sin duda es de los más discretitos de toda la lista. Más que el siguiente, desarrollado por Universal Technical Institute, que destaca por su aspecto de “deportivo callejero”. Enormes llantas de 18”, frenos de alto nivel, jaula de seguridad y una suspensión de aire digital ajustable
3dCarbon aporta su granito de arena en un Fiesta verde “vistoso” con las clásicas franjas longitudinales de competición. Recuerda profundamente al “verde lechuga brillante” del Focus RS. Tampoco tiene nada que ver con el Fiesta de L&G Enterprises que apuesta por el rojo, el negro y el gris como colores, la fibra de carbono como material decorativo y una integración perfecta con el iPad en el interior.
¿Adivináis de qué va el Fiesta de H&R Springs? Pues aunque no lo parezca su versión del Fiesta no tiene mejoras en su chasis, sólo detalles vistosos como la carrocería de color verde opaco y las llantas con detalles dorados. Steeda Autosports sí que firma un Fiesta con barras estabilizadoras, suspensión y amortiguación de lujo, cambios para el motor, incluyendo una mejorada entrada de aire, y un cambio de corto recorrido.
FSWerks pone el punto y final a la lista con una mecánica más retocada, entrada de aire y salida de escape así como pequeños detalles en su carrocería y en su chasis. El dicho de “en la variedad está la diversión” queda perfectamente expresado. Aunque sí echo en falta alguna excentricidad del tipo de un Fiesta descapotable.
En el SEMA Ford presentará un motor para el Fiesta un tanto inusual. Es un gasolina sobrealimentado con la denominación de Ecoboost, un 2.0 litros de partida que incrementa su capacidad hasta los 2.3 litros. La potencia de salida es de 350 CV, justamente lo que entrega el todopoderoso Focus RS500. Más que hacernos imaginar una versión salvaje del Fiesta podríamos ir pensando en el Focus RS de la siguiente generación.
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Solo te das cuenta de lo que tienes cuando lo pierdes.
